Análisis de Spider-Man 2 en PS5, videojuego de acción y aventura en mundo abierto desarrollado por Insomniac Games.
El equipo de Insomniac Games, conocido por Ratchet & Clank y Spider-Man, demostraron, una vez más, que conocen una fórmula infalible para el entretenimiento en consolas. Su último gran proyecto, Spider-Man 2, es una obra maestra de los videojuegos de superhéroes y una producción imperdible para los usuarios de PS5.
Entre New York y Brooklyn
Spider-Man 2 se ubica nueve meses después de los acontecimientos vistos en Spider-Man: Miles Morales, por lo que nos encontramos con una campaña que engloba los deseos, los miedos y los conflictos de los dos “spideys” y desemboca en una dramática narrativa.
Por un lado, encontramos a Peter Parker, quien hace lo posible por pagar los gastos de la casa de la Tía May. Por otro lado, tenemos a Miles Morales, que intenta, sin suerte, rescatar un poco de tiempo para finalizar su ensayo de ingreso universitario. Ambos Spider-Man están viviendo sus propias crisis personales y a todo esto se le suma que, justamente, son los héroes de la ciudad de New York (y ahora también Brooklyn y Queens).
Crisis personales y máscaras que se caen
El choque entre la intimidad y la heroicidad, la fricción entre cuidar a la familia o proteger a un territorio entero, y buscar convicciones para saber qué es lo correcto, son características narrativas que marcaron la campaña de Spider-Man y Spider-Man: Miles Morales, y en este caso no hay excepción.
La notable presencia de Harry Osborn, el mejor amigo de Peter Parker, luchando con una “enfermedad” y el regreso de J.J.J. a El Clarín para hundir a los héroes arácnidos son algunos de los nudos de la historia de Peter y Miles para agudizar el dramatismo de un relato emocionante para los héroes arácnidos.
Monstruos, abominaciones y deshumanización
Sin embargo, lo más importante en la campaña de Spider-Man 2 es que los proyectos personales, las relaciones y las misiones heroicas entran en un bucle ansioso con la aparición de villanos emblemáticos tanto para el universo de Marvel como para la cultura pop. Ya no estamos hablando únicamente de personajes armados con tecnología mortal y poderosa, sino de monstruos, abominaciones y transformaciones inesperadas.
El más hablado fue Venom, un clásico de la cultura de Marvel que, de paso, potencia el sistema jugable de Spider-Man de Peter Parker con habilidades mutantes y el tan querido “traje negro”. De la misma forma tenemos la aparición estelar de Lizard en un estado deshumanizado: sin prendas de científico ni voz, solo su forma reptil, monstruosa y repleta de púas asesinas.
A Venom y Lizard se le suma Sandman, un villano que disparó su popularidad en la cultura pop con la tercera película de Spider-Man 3 de Sam Reimi, además de Kraven, un ágil y peligrosísimo “cazador” que puso un pie en las calles de New York con un ejército de asesinos armados hasta los dientes.
La segunda ciudad que nunca duerme
Los enemigos de Spider-Man 2 presentan un arsenal mucho más variado que las anteriores entregas y logra un dinamismo increíble: desde armas de fuego hasta artilugios innovadores, cada combate nos invita a pensar y re-pensar nuestras jugadas maestras, las habilidades y los trajes disponibles y las posibilidades para salir aireoso de la situación.
Por suerte, estamos ante uno de los mejores videojuegos de superhéroes de la historia y no solo por la dramática trama que cruza a ambos protagonistas, sino por el enorme trabajo de Insomniac Games para brindarnos un sistema de combate tan pulido y satisfactorio como el de Spider-Man 2.
Desde el lanzatelarañas, pasando por el gancho arácnido, la telaraña de captura o la explosión de trueno, tanto Peter como Miles cuentan con habilidades para frenar el crimen de las calles de New York y sus alrededores. Pero la cosa no queda en “más juguetes y más combos”, tampoco en “más movimientos”, sino en la calidad de las adiciones y su encastre narrativo: Peter Parker emplea la tecnología de los spider-brazos y el simbionte con la capacidad de desplegar raíces de tentáculos que cazan a cualquier enemigo cercano, mientras que Miles continúa desarrollando poderosas habilidades con el veneno bioeléctrico. Enfrentarse a enemigos, sean esbirros, mini-jefes o antagonistas, no solo es satisfactorio al mando y adictivo a los combos, sino que es espectacular a la vista.
No te detengas a mirar los paisajes
El sol se asoma a lo lejos y pintorrea de un cálido tono amarillento las baldosas de una metrópolis bulliciosa, con peatones que se chocan al hablar por teléfono y autos que recorren las calles con bocinazos desesperados. Nuestra irrupción es inminente, pero, en realidad, no viene a arruinar nada: los paisajes de la recreación de New York y los distritos que la rodean se disfrutan mientras cruzamos la vereda a pie o derrotamos a los cazadores de Kraven; mientras nos balanceamos entre los bajos edificios o nos impulsamos desde la cima de los rascacielos; mientras surcamos las alturas con las alas o correteamos entre los ventanales de una oficina.
Hacernos sentir un héroe es algo común en muchas historias, pero convertirnos en un superhéroe es otra cosa. El equipo de Insomniac Games tiene la receta perfecta para entretenernos con caóticas mecánicas de combate, pero también para mantenernos pegados al asiento con dramáticas historias. Spider-Man 2 es una historia emocionante con acción adictiva y aventura inesperada. Encarnar a Peter Parker y Miles Morales nos hizo sentir la gran responsabilidad de dos héroes que, por suerte, tienen un gran poder para contrarrestarla: el de ser los superhéroes más importantes de la actualidad de los videojuegos.
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