Reseña de Blasphemous, soulslike y metroidvania desarrollado por The Game Kitchen para PS4, Xbox One, Nintendo Switch y PC.
El folclore español, la iconografía religiosa, el arte barroco y la Sevilla Inquisitorial fueron las bases para crear el arte de Blasphemous, un videojuego de aventura y acción que nos llama a eximir nuestros pecados a través del Penitente, una persona vestida con un traje de tela, y un casco metálico enredado con espinas. Comenzará un largo viaje para liberarse de la cruz que lleva cargando a sus espaldas.
Al Penitente lo acompaña Mea Culpa, su espada, y única arma para enfrentar los peligros que esperan en las tierras de Cvstodia. Los primeros pasos en la aventura serán interrumpidos por una bestia que, entre golpe y golpe, levanta decenas de cadáveres con las mismas vestimentas que nuestro personaje. Pero el Penitente que encarnamos no falla el golpe mortal, y cuando el monstruo cae ante nuestros pies, nuestro personaje llena su casco con la sangre de la bestia y se empapa el rostro con los fluidos.
Cada paso en Blasphemous despierta temor a lo desconocido, pero mucho más de asombro por los hermosos escenarios que decoran la aventura. Desde un pueblo con pequeñas casas instaladas en torno a una Iglesia, hasta las mismas penumbras de un bosque fantástico. En cada recoveco de Cvstodia nos esperan personajes con motivaciones desconocidas, y algunas veces demasiado complejas.
“Nuestro personaje usa únicamente la Mea Culpa para partir al medio a los enemigos”
Las bestias estarán acechando detrás de cada entrada, esperando a que lleguemos para matarnos una y otra vez. El combate es demasiado simple: nuestro personaje usa únicamente la Mea Culpa para partir al medio a los enemigos, contando con la posibilidad de aplicar mejoras a lo largo de la aventura, tanto para el arma como para sus mismas capacidades humanas. Usar una sola espada en toda la campaña es algo negativo en la experiencia. A la larga, el combate se sentirá plano, repetitivo y con falta de profundidad.
Cada monstruo derrotado nos otorga “Lágrimas de enmiendas” que podremos usar para mejorar la Mea Culpa o las habilidades del Penitente. La comparación con la saga Souls es inmediata: Blasphemous nos presenta el “Prie Deu”, una suerte de fogata de Dark Souls para que recuperemos vida, guardemos la partida, pero a cambio revivan todos los enemigos que hayamos derrotado.
Si en algún momento morimos, el Penitente soltará todas las lágrimas de enmiendas que obtuvo por cada bestia derrotada. Volveremos al último punto de control (que a veces puede ser lejano) con la chance de recuperar aquellas lágrimas soltadas. Lo bueno es que, si morimos otra vez, se nos generará otra marca con lágrimas de enmiendas, y las anteriores no desaparecerán. Esto genera un farmeo indirecto de lágrimas de enmiendas, y un aumento de habilidades lento pero seguro.
“Los controles no siempre son eficaces, y a veces podríamos morir por un error del mismo videojuego”
Morir en Blasphemous nos hace aprender de los errores, pero también nos ayuda, de alguna forma, a obtener un empujón de nuevas habilidades para derrotar esos enemigos que antes se nos hacían imposibles de enfrentar. La estructura metroidvania de sus escenarios promueven la exploración de las plataformas para saber qué hay en la siguiente habitación. No obstante, los controles no siempre son eficaces, y a veces podríamos morir por un error del mismo videojuego, y cuando el punto de control se guardó hace una hora… las motivaciones para continuar caen en picada.
Lo que más destacamos de Blasphemous es su diseño de arte. Un videojuego que no solo nos presenta escenarios espectaculares, sino unos monstruos fantásticos tanto en sus formas de esbirros como de jefes finales. Además, cada secuencia se encuadra con epicidad, angustia y frenetismo gracias a la grandiosa OST de Carlos Viola, compuesta por guitarras que marcan el compás de una aventura inolvidable.
La actualización de Stir of Dawn que llegó el pasado 4 de agosto a Blasphemous, añadió nueva partida+, un segmento para la campaña con nuevos esbirros y jefes, así como mejoras adicionales para la Mea Culpa. Es un disfrute adicional sin cargo para la campaña principal del videojuego.
Blasphemous es uno de los mejores videojuegos independientes de los últimos años. Su diseño de arte es soberbio, y nos hace disfrutar cada paso por las tierras de Cvstodia. La música de Carlos Viola terminará despertando el sentimiento de angustia, temor o frenetismo que requieren las secuencias del videojuego, y si bien no presenta una jugabilidad a la altura de sus mejores apartados, no es lo suficientemente negativo como para arruinar una experiencia de lo más recomendable.
Blasphemous es un videojuego de acción, aventura y plataformas con estructura metroidvania y soulslike.
| Modos de juego | Un jugador |
| Duración | Alrededor de 20 horas |
| Rendimiento | Sin problemas |
| Idioma | Textos y voces en español |
| Accesibilidad | Sin opciones |
| ¿Es necesario jugar algún título anterior? | No |
| Desarrolladora | The Game Kitchen |
| Editora | Team17 |
| Plataformas | PlayStation 4, Xbox One, PC y Nintendo Switch |
| Plataforma de reseña | PlayStation 4 (slim) |
Que buena pinta tiene este juego!!!
¡Te lo recomiendo! Es muy bueno. Jugalo y decime qué te pareció 🙂