Two Point Campus: School Spirits Review – Formadores de cazafantasmas

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Review de Two Point Campus: School Spirits, DLC para el videojuego de gestión desarrollado por Two Point Studios.


Ya lo mencioné más de una vez en Solo Jugadores. La franquicia de Two Point es uno de los mejores exponentes en videojuegos de gestión, no solo por sus complejos sistemas e intuitivas mecánicas (tanto en la versión de PC como de consolas) sino también por su tono humorístico para tratar temáticas un tanto serias como la salud (Two Point Hospital) y la educación (Two Point Campus).

En el caso de Two Point Campus, el último videojuego de la saga, el equipo de desarrollo sumó dos DLCs para que la experiencia siga expandiéndose en todo sentido: más elementos para gestionar, más humor disparatado y cada vez menos sentido. ¡Y eso es perfecto! El contenido descargable “School Spirits” fue el último añadido para el campus y nos trae novedades más que interesantes que van más allá de la vida (y la muerte).

Para ser cazafantasmas también necesitás de un título


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Two Point Campus: School Spirits nos presenta la zona de Lifeless Estate, una institución académica colmada de fantasmas y espíritus malignos que hacen todo lo posible para que los estudiantes la pasen mal en su rutina. ¿Y ahora? ¿A quién llamamos? Bueno, cualquiera de nosotros diría “a los cazafantasmas”, pero antes de hacerlo necesitamos que existan. O sea, hace falta crear una licenciatura.

El DLC introduce dos nuevas ramas educativas. Una es la de “Ghost Busting”, que enseña cómo cazar y atrapar a los fantasmas que merodean entre los pasillos llorando penas de sus vidas pasadas. También está la materia “School Spirits” que con mucha ironía y humor les enseña a los fantasmas cómo tienen que hacer para que su ¿vida? no sea tan miserable. Ambas materias presentan los arquetipos de “Ghost Detector” y “Dead Student” respectivamente, así que hay más personajes para gestionar en la maqueta del enorme campus de Two Point.


Por otro lado, en Lifeless Estate los estudiantes tienen que lidiar con los espíritus que vienen a molestar en las aulas e interrumpir las clases constantemente. Las soluciones van desde contratar a un cazafantasmas experto o a un conserje valiente que se encargue de echar con la escoba a los espíritus.

Lastimosamente, el contenido termina allí. Se tratan de añadidos entretenidos que podrían haberse complejizado más para encajar con la experiencia del juego base, pero que no hacen más que brindan un “lado-b” en el campus de Two Point. Unas pocas horas de diversión entre fantasmas revoltosos e interacciones con sus cazadores.

Miguel Medina
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